La estación de Grandvalira en Andorra ha impulsado un grupo de iglús que se ofrecen a los clientes como una experiencia, siguiendo el modelo de países nórdicos como Finlandia o Suecia, donde son comunes los hoteles y bares iglús de hielo artificiales.

El Iglú-Hotel Grandvalira, a 2.350 metros de altitud, está construido totalmente de nieve y cuenta con un total de cinco iglús-dormitorios de 20 metros cuadrados cada uno donde se podrá vivir una verdadera experiencia ártica con todas las comodidades.

Los iglús-dormitorios cuentan con camas equipadas con materiales especiales, pieles y sacos de plumas que aguantan hasta -40ºC para ofrecer el máximo confort.

El Iglú-hotel Grandvalira dispone además de dos originales iglús con jacuzzi, uno de ellos privado para los huéspedes de la suite, para relajar los cinco sentidos. Estos iglús tienen el techo abierto al exterior que permiten observar las estrellas a la vez que se disfruta de un hidromasaje a temperaturas agradables de 36ºC.

El Iglú-hotel Grandvalira también dispone de iglú-salón de té, donde los huéspedes pueden disfrutar de un té caliente entre amigos. Uno de los iglús más interesantes del complejo es el restaurante, con capacidad para 65 personas y un lugar ideal para degustar las mejores fondues de queso acompañadas de un vino caliente.

Las instalaciones también disponen del Iglú Bar, construido con nieve, que invita a una "fresca" parada para tomar algo después de una mañana esquiando. El bar está inspirado en Barcelona: esculturas gaudinianas y grandes monumentos como la Sagrada Familia. En el Iglú-bar, además, podemos encontrar el Iglú-Restaurante, donde se celebran banquetes y cenas de noche.

Las Suites también son temáticas: Venecia y el Polo Norte inspiran dos de las habitaciones. La tercera rinde homenaje a John Lennon y se inspira en el Strawberry Fields del Central Park de Nueva York.

El dominio esquiable de Grandvalira

Grandvalira tiene casi 200 kilómetros esquiables, 110 pistas de todos los niveles y mucha pasión por los deportes blancos. La esencia alpina se puede respirar en las pistas emblemáticas como el estadio Avet y con recorridos casi vírgenes como el que dibuja la mítica pista Granota de Grau Roig.

Grandvalira ha ampliado los programas Top Class de la Escuela de Esquí y Snowboard con formulas para cada usuario. El aprendizaje específico para familias a través de los programas Top Class, cursos adaptados cada nivel y 100% personalizados.